via el diario madryn

El movimiento turístico del fin de semana largo del Bicentenario de la Independencia generó un promedio de ocupación hotelera en todo el país del 60%, según datos provisorios del Ministerio de Turismo. Fuentes oficiales y privadas del sector en diversas provincias, en particular las de mayor actividad turística, suministraron a Télam datos propios que coinciden en cuanto al promedio de ocupación de las cerca de 600 mil plazas hoteleras argentinas.

Entre esas provincias figura Córdoba, que tuvo ocupado el 65% de sus 120 mil plazas, con algunos picos de 95% en localidades de escasa capacidad de hospedaje, como Santa Rosa de Calamuchita y Villa General Belgrano, ésta última con unas 5.000 camas.

Otra provincia fuerte en ese aspecto, Entre Ríos, con sus termas atrajo turistas, que ocuparon el 75% de sus 54 mil plazas hoteleras, especialmente en Colón, que llegó al 80%, lo mismo que en Paraná, aunque la capital provincial tiene mayor disponibilidad.

En Gualeguaychú, los hoteles de más estrellas tuvieron una tasa de ocupación que rondó el 90%, mientras que en los hoteles de tarifa media apenas superaron el 50%, con la mayoría de las habitaciones ocupadas por parejas, siendo casi nulo el alquiler de habitaciones familiares”, según la Cámara Entrerriana de Turismo.

En Mendoza, el Ente Provincial de Turismo indicó que llegaron unos 45 mil turistas y sus perspectivas de un 60% de ocupación se convirtieron en un 78% en promedio en todo el territorio, ya que muchos visitantes llegaron sin reserva previa. Mar del Plata, con 65 mil plazas hoteleras y mayor centro turístico de las provincias, recibió en el fin de semana largo unos 75 mil turistas, que generaron una ocupación del 60%, según el Ente Municipal de Turismo de General Pueyrredón.

A Santiago del Estero llegaron unos 20 mil turistas atraídos por jornadas a pleno sol y un variado programa deportivo y artístico, en especial a Termas de Río Hondo y la capital provincial, que determinaron un nivel de ocupación superior al 90% en toda la provincia, informó hoy la Secretaría de Turismo termense, que destacó la influencia en estos números de los festejos del Bicentenario en la vecina Tucumán.

San Luís, que dispone de unas 20 mil camas registradas tuvo un 70% de ocupación, con la mayoría de los turistas en la serrana Villa de Merlo, donde se concentran 15 mil de esas plazas y que fueron ocupadas en un 78%, igual porcentaje que Potrero de los Funes, aunque esa localidad sólo tiene 3.700 plazas.

Tucumán, al margen de su capacidad hotelera de 8.000 camas, fue la estrella del fin de semana del Bicentenario, por ser la Cuna de la Independencia, y como lo indicaban las reservas previas registradas tuvo la capacidad colmada en San Miguel y la vecina San Javier, y un ocupación del 80% en todo su territorio.

En el litoral también se destacó Misiones, que con unas 22 mil camas turísticas, tuvo un promedio del 60% de ocupación, con mayoría de visitantes en Puerto Iguazú, donde se encuentran unas 15 mil de esas plazas, que estuvieron ocupadas en un 80%.

En el Fin del Mundo, Ushuaia alcanzó una ocupación del 85% sobre sus 6.000 camas disponibles, lo que pudo ser aún mejor si no siguiera faltando nieve para habilitar los centros de esquí, cuyas inauguraciones se postergaron tres veces esta temporada.

Al respecto, el presidente de la Cámara de Turismo de Ushuaia, Marcelo Lietti, comentó a Télam que “tradicionalmente julio es un mes muy fuerte” para los fueguinos, con índices de ocupación del 90 o 92%, “mientras que este año apenas se alcanzó el 60%, con excepción de estos tres días por el feriado largo”.

La provincia de Buenos Aires, que cuenta con unas 180 mil plazas hoteleras -el 30% de las de todo el país-, registró una ocupación general del 60%, según su Subsecretaría de Turismo.

No obstante, por su tamaño y diversidad esta provincia no es tomada como un todo en las mediciones, sino por ciudades o regiones, como el caso mencionado de Mar del Plata, o la zona serrana, que alcanzó el 65% de ocupación hotelera, y las termas de Caruhé, que llegaron al 67%, aunque con muchas menos plazas que la ciudad balnearia.